DragonFly de Valenta (PARTE I). Por Francisco Hernandez
Quiero presentaros –por iniciativa del inefable Javier Iglesias- mi nuevo velero para participar en la liga Open de la F5J. Se trata del velero Dragonfly de la casa Valenta http://www.valentamodel.cz/ del que hay muy poca información.
Habrá una Primera Parte en la que se relate el montaje razonado paso a paso del velero y una Segunda Parte en un artículo futuro donde se expongan las pruebas de consumo y el comportamiento en vuelo del velero.
¿Por qué el Dragonfly de Valenta?
No esperéis una explicación demasiado racional para la elección de este velero y no el conocido Pulsar, el espectacular Ava 4000 o el Thermic Dream. Mi objetivo era tener un velero con la envergadura suficiente como para ‘dar guerra’ en la Liga F5J y disfrutar como un gorrinillo al volarlo pero sin gastarme el dineral que cuestan las máquinas arriba citadas, cuando reuní el valor suficiente como para dar el paso acababa de salir el flamante nuevo velero de valentamodels.cz: el Gracia, el hermano mayor de los probados y conocidos Astra y Avia (http://www.rcgroups.com/forums/showthread.php?t=1123536; http://www.livef3.com/reportages/Reportajes2009/astra/astra.html)
Absolutamente entusiasmado con el descubrimiento y dando por supuesto que el nuevo velero de topmodel tendría el precio contenido que tienen los otros modelos, pregunté cuanto me salía compra + portes y me respondieron que casi 400€, que me pareció una barbaridad sin ‘gracia’ alguna.
Con ese jarro de agua fría sobre la cabeza me puse a preguntar y consultar a mis amigos veleristas y el que lo tuvo tan claro desde el principio que me echó directamente una bronca fue Jorge, hoy presi del club Xaloc, a quien conocía por haberle comprado de segunda mano un Triangle de Valenta Models , que fue mi primer avión serio después de los corchos para competir en F5J y con el que hice mis primeros miles (1.000 puntos FAI) en la liga madrileña. Cuando volé el Triangle pude disfrutar en profundidad de las especiales sensaciones que transmite el vuelo de un velero, es el planeador más dócil y eficiente que he volado hasta la fecha.
Así que hay que entender la bronca de Jorge cuando me dijo que por ese precio no debía ni dudarlo: un Dragonfly de Valenta Models que es como volar un Triangle de 3,5 metros. Gracias Jorge por tenerlo tan claro y disipar mis dudas. Hay varios sitios donde poder hacerse con un Dragonfly, el más sensato es http://www.modellbau-bichler.com, basta hacer una comparativa con las tiendas clásicas europeas para darse cuenta de por qué hago esta advertencia. De modo especial quiero darle las gracias a Christopher Blank, durante más de un mes de esperas y envíos problemáticos estuvo permanentemente disponible, dando siempre la cara y cumpliendo su palabra en todo momento. Aunque os voy a ahorrar el culebrón –mis estimados lectores- baste reseñar que antes de que el modelo que os enseño estuviera en mis manos pasaron otros dos que no eran el mío. Eso sí, la historia tuvo final feliz.
Lo primero que llama la atención son las ‘instrucciones’, o más bien la ausencia completa de instrucciones salvo una fotocopia enana de mala muerte con dibujos del velero puro de morro sin cortar ¿¿¿???
Esto podría interpretarse por parte del fabricante como un “absténganse novatos”, porque el montaje plantea tantos intríngulis que es para quitar la afición. Una vez hecho a la idea del curre que tenemos por delante viene el extasiarse ante la preciosidad de velero que tenemos por delante:
Guauuuuu! Las líneas del fuselaje son preciosas, de sección casi ovalada, muy estrecho –ya veremos luego lo que significa esta afirmación-, morro que se desliza hacia abajo para que el aire actúe sobre el borde de ataque de las alas, largas mechas de carbono de refuerzo en el interior del fuselaje, enorme deriva con superficie móvil integrada, semialas enormes con diedro, generosas superficies de alerones y flaps, winglets de fibra en los extremos que hay que tener cierta precaución con ellos porque cortan como cuchillas y son tan grandes las semialas que maniobrar con ellas es bastante complicado (hay momentos en los que lamento no haberme comprado un velero con ala en 3 piezas…), la construcción es tradicional con costillas de balsa y chapado de balsa en el borde de ataque y en las proximidades de la unión de las semialas con el fuselaje, unión que viene resuelta con dos tetones cónicos de aluminio y una espectacular viga rectangular de carbono que parece pensada para resistir la tracción del torno en F3J que convence plenamente. El estabilo encaja en dos piezas es ligerísimo y desmontable –enorme acierto- y su movimiento es integral.
El montaje es laborioso pero sencillo para quien tenga experiencia en poner veleros en orden de vuelo. Empezando por las semialas, escogí unos servos pequeños de piñonería metálica Hextronik MG14 (http://www.hobbycity.com/hobbycity/store/uh_viewItem.asp?idProduct=8303) que tengo archi-probados en otros veleros y cuya relación precio-calidad me parece insuperable, brazos de servo de varilla metálica y transmisiones de rótula, o más bien de “lótula” ya que son unas baratísimas que compré hace tiempo para probar en hobbycity y ahora han encontrado acomodo. Soldé los cables de los servos a un conector Multiplex con la idea de encastrarlos en el ala porque si miramos el fuselaje tiene un cajeado diseñado al milímetro para utilizar este tipo de conectores. Este es uno de los detalles en los que si no tienes experiencia te puedes complicar la vida hasta el infinito, porque las ‘instrucciones’ no dicen nada al respecto. Con unos sencillos alargadores se hacen llegar los cables hasta el receptor, advierto que hay que tener cuidado de no liarse al soldar los cables a riesgo de cortocircuito y servo quemado antes de comenzar su vida útil, lo digo porque me ha pasado, ya que he ido avanzando a base de robar tiempo al sueño y sacar ratitos donde parece que no los había, dejando trabajo a medias y al retomarlo las cosas no estaban tan claras como cuando las dejé –que os voy a contar que no sepáis-.
Los servos de alerones van pegados a la balsa con el brazo por el intradós, pero los brazos de los flaps corren el peligro de topar contra el suelo si los coloco por el intradós, así que me decidí a sacar los brazos por arriba, es la primera vez que lo hago y soy consciente que no es el trabajo más fino de mi vida, pero funcionar funciona. Busqué unos porta servos chinos que tenía en casa, corté tres taquitos de balsa que pegué al extradós, atornillé la bancada del servo de manera que si hay que hacer cambios sea de la manera más sencilla posible, y como tapa corté un cuadradito rojo de uno de esos separadores de plástico que guardo de los trabajos antiguos de mis alumnos, pegado con fixo al ala. Lo más doloroso es agujerear la chapa de balsa nuevecita y reluciente para sacar el brazo del servo por arriba, pero bueno, funciona muy bien y queda camuflado con los cubre-servos amarillos que venían de fábrica y que he recortado para adaptarlos a su nueva ubicación.
En cuanto al fuselaje, pues lo de la bancada original es más falso que un Judas de plástico, y si no se lo creen pasen y vean, porque ha sido como mi club, Ala de 3:
1. Bancada original con sus servos escalonados, su hueco para la batería y su morrito redondeado, ¿morrito redondeado? ¿no será la bancada de servos del velero puro? Pues va a ser que sí, estos checos… 2. Bancada ‘tuneada’ para convertirla en bancada de servos para velero motorizado incluso con su repisita para ubicar el receptor: chachi (y una m..). 3. Micro-bancada de servos adaptada a las necesidades reales, a saber, tornillos de los servos asequibles al destornillador por si hay que cambiarlos en el futuro contando con que tenemos ínfimo espacio en cabina para ubicar regulador y batería de 3-4 S que es lo que necesita este bigardo para remontar el vuelo. Por cierto, los servos, una parejita de Hextronik MG-16, como sus hermanos pequeños pero más robustos. Las transmisiones de varilla de acero con funda pegada al fuselaje la mar de sencillo y eficiente.
Lo más jartible con diferencia de todo el montaje del velerito han sido los conectores MPX para que encajen a la perfección cuando metes las semialas en la varilla/viga de carbono y los tetoncillos de aluminio: que paliza, Dios mío, que paliza. Uno quedó bien con mucho esfuerzo, el otro se me torció a última hora y tuve que arrancarlo del ala cuando ya había fraguado el epoxi, la sensación es parecida a cuando te llega la factura de la luz o el borrador del IRPF y la lata que me ha dado hasta que estuvo en su sitio no tiene nombre.
En cuanto a la motorización, tenía tres brushless chinorris susceptibles de ser ubicados en este morro, en un segundo articulillo me detendré en la motorización, las baterías, el consumo y el vuelo. La bancada de motor venía ya puesta de fábrica así que desde que la ví vengo cruzando los dedos para que hayan contemplado la necesaria incidencia del motor, para hacer los agujeros usé la bancada de aluminio que suelen traer los brushless, me ayudé de un invento de los ameriscanos llamado retulador (jejeje) que –casualidades de la vida- me di cuenta que tiene el mismo diámetro que el bujero central de la bancada, pegué la pieza de aluminio con pegamento de contacto para que no se mueva, hice los boquetes, despegué la pieza de aluminio, atornillé el brushless no sin antes someter a dieta de adelgazamiento a los tres cables del motor que tuve que pegar al fuselaje con pegamento caliente para que no rocen con la carcasa (no contemplo ni en el Easy Glider la barbaridad de agujerear el fuselaje para sacar los cables por fuera: ni mijita).
Conclusiones. Mal el tema instrucciones, no es cierto que cuanta mayor calidad y complejidad del material de vuelo las instrucciones tengan que ser inversamente proporcionales, estas instrucciones son cutres y no están a la altura del velero. Winglets peligrosos porque cortan como cuchillas.
Extraordinariamente bien pensado el montaje en el campo de vuelo, ni un tornillo, no hay que sacar el destornillador para nada, son piezas que ensamblan a la perfección.
Líneas hermosísimas de diseño del velero y aunque no tengo datos de peso en orden de vuelo intuyo que no excederá demasiado de los dos kilos. Espero que el rendimiento aerodinámico del modelo en vuelo sea tan espectacular como las líneas de su diseño.
Un cordial saludo, buenos vuelos y hasta la próxima.
Francisco D. Hernández.
Hola Francisco.
Una pena que no haya sabido antes lo de tu nuevo velero.
Yo soy de top model, tengo un Fascination (3,6m), un Gracia (3m) y un Graphas (3m).
todos me los compré sin entelar, ya que eran 100 € más baratos, y el entelado chino no está mal de precio.
Además el hecho de que el ala te viene sin el entelado, te permite hacer modificaciones con el tema de la sujección de las alas y las conexiones eléctricas.
Te mando unas fotos por email, ya que aquí no me deja ponerlas.
De todas maneras, ya me contarás que tal la experiencia con el dragonfñy. La pinta que tiene es fantástica y muy español.
Y si puedes, traetelo a Majadas, podemos comparar los modelos.